El concepto que tenemos de nosotros mismos afecta a todas las facetas de nuestra vida. Si esta forma de evaluarnos es negativa (sentimos miedo, no confiamos en nosotros, necesitamos la aprobación de los demás, no reconocemos nuestros logros, nos exigimos demasiado, nos criticamos, etc.) el efecto sobre nuestra vida será también negativo y repercutirá en una autoestima poco sana que por supuesto se traducirá en nuestras acciones y en nuestras relaciones, proyectos y metas. La imagen que proyectamos parte de la aceptación y el reconocimiento que nos tengamos. Existen técnicas orientadas a aprender y modificar esos aspectos que sería recomendable abordar para querernos, cuidarnos, mimarnos y valorarnos más y mejor.